Por Priego pasa uno de los ríos más importantes de la provincia, el Río Escabas.

La gran mayoría de los habitantes de la localidad hemos pasado largas tardes de verano y recorrido sus orillas con amigos o familiares. 

¿Quién no se ha dado un baño en sus aguas?

¿Quién no ha ido a hacer un picnic, merendar o comer contemplando la vegetación y la fauna y escuchando el rumor del río?

En este artículo no solo aprenderás más sobre esta belleza de la naturaleza sino que conectarás con él y sentirás que estás a su lado.

¡Empezamos!

 

El río Escabas. Visión geográfica.

El río Escabas nace en el parque del Hosquillo, a 1.500 metros de altitud, en las inmediaciones de la sierra de Tragacete, cercano a los nacimientos de los ríos Cuervo y Júcar. Forma parte de la cuenca hidrográfica del Tajo.

Recorre tres comarcas: la Serranía Alta, el Campichuelo y la Alcarria.

El río atraviesa cinco municipios: Las Majadas, Poyatos, Fuertescusa, Cañamares y Priego. Desde Cañamares hasta Priego cuenta con 7 aprovechamientos de agua, 6 molinos y 1 batán.

En total tiene un recorrido de 60 kilómetros.

Su cuenca tiene una superficie de 706 kilómetros cuadrados.

Desemboca en el río Guadiela, en Albendea.

¿Sabías que su principal afluente es el río Trabaque?

El río Escabas destaca por sus aguas limpias, transparentes y cristalinas. Además, es un río que aporta unos recursos hídricos irregulares, aunque, en el año hidrológico sus recursos son abundantes y continuos.

 

Diego Jesús Jiménez y el río Escabas.

Para Diego Jesús Jiménez, poeta pricense, el río Escabas era su santuario y un lugar de reflexión y meditación. 

Además, el poeta le dedicó una de sus obras a esta majestuosidad natural.

En sus riberas silba

la luz fría del alba en la serpiente, y habitan sus palacios venenosos las víboras.

Lo recuerdo en los huertos

de la hoz, levantando

sus gozosos altares; o en sus púlpitos verdes

donde los lirios, solos, sobre los zopeteros, se incendian en las aguas

rodeados de espadas vegetales y sombras.

En él arden la zarza y el espino, mañanas con las flores

que de niños pisábamos. Nos dejaban sus aguas

el húmedo silencio de las alfarerías

y las fuentes; lo subían al pueblo nuestros ojos mojados. 

¡Oh,

río que al recordarlo se detiene

en aquella mañana cuando, junio, radiante, desnudaba

los cuerpos más hermosos y, a escondidas, olíamos sus ropas

pues en ellas quedaban, todavía, los cuerpos,

tibiamente encendidos por secretos aromas!

 

 

El río que nos lleva de José Luis Sampedro.

En la obra del famoso José Luis Sampedro, «El río que nos lleva», el autor rinde homenaje a los gancheros del río Tajo en su labor de transportar la madera río abajo hasta llegar a Madrid.

Los trabajadores transportaban con esfuerzo los troncos por los ríos de la Sierra, La Alcarria, pasando por barrancos, hitas y páramos, hasta llegar a la vega de Aranjuez.

Fueron muchos los gancheros que recorrieron las aguas del río Escabas con este fin.

 

Si quieres conocer más detalles sobre el río Escabas no te pierdas la visita guiada que se realizará de forma gratuita en la localidad de Priego el día 1 de mayo. Contáctame para más información.